En este pueblo no quieren disgustos ni cosas raras. Por eso, han colocado un cartel en el que dejan muy claro que los caballos sin cabeza no pueden entrar. Menos mal que han avisado.
En este pueblo no quieren disgustos ni cosas raras. Por eso, han colocado un cartel en el que dejan muy claro que los caballos sin cabeza no pueden entrar. Menos mal que han avisado.