No es lo mismo hacer el perro que hacer el gato

Como podéis comprobar a continuación, no es lo mismo hacer el perro que hacer el gato. ¿Vosotros con qué opción os quedáis? Yo lo tengo bastante claro…



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *