Este naranja (que medio parece un limón por el color) ya sabe que le toca morir. El exprimidor le está esperando y ya está colocado para quedarse sin jugo. Una triste muerte de la que alguno se aprovechará.
Este naranja (que medio parece un limón por el color) ya sabe que le toca morir. El exprimidor le está esperando y ya está colocado para quedarse sin jugo. Una triste muerte de la que alguno se aprovechará.