Nunca te fíes de un amigo si te desafía a hacer algo y se pone con una cámara a grabar. Seguro que terminas haciendo el ridículo o te llevas un buen golpe en los cojones.
Nunca te fíes de un amigo si te desafía a hacer algo y se pone con una cámara a grabar. Seguro que terminas haciendo el ridículo o te llevas un buen golpe en los cojones.